LUZ EN EL SENDERO   TOMO I

Capitulo 15

 

 

Que la Luz meridiana que viene de Oriente a iluminar Occidente os alumbre a todos por igual. Amados Míos, presentes y ausentes, una vez más Estoy con vosotros para concluir Mi Obra Magnifica de “Luz en el Sendero” que como su nombre lo indica, es una Luz en el sendero del hombre, fuera completamente de todo misticismo, fuera completamente de todo aquello que viene estropeando el adelanto a la evolución del hombre, al progreso del hombre.

Estoy entre vosotros nuevamente, créalo el hombre o no lo crea y como dijera en el primer capítulo de Mi Obra denominada “Luz en el Sendero”, os Digo nuevamente: “Soy el Camino, la Verdad y la Vida. El que crea en Mí, que haga lo que Yo”. Amados Míos cuando aprenderéis que si os ofenden os quedéis con ello y en vez de contestar con una ofensa, digáis; Yo Te Bendigo, Yo Te Perdono. ¿Hasta cuándo amados Míos? ¿Hasta cuándo escuchare esto de vuestros labios?, para que estos brillen al conjuro de la palabra “Yo Te Perdono”.

Si vosotros hicieses caso de vuestros Guías, vuestros Guías que se desviven por encauzaros por un camino mejor, por un camino fuera de espinas y abrojos, por un camino en el cual queda nulificada la Ley de Causa y Efecto por el cual hay Luz y más Luz, dejando por completo las sombras. Empero sois aun sordos, aun no lográis captar los mensajes de vuestros propios Guías, aun no lográis entender el bello mensaje que vuestra conciencia os viene dejando. Porque tarde, tarde por siempre es cuando escucháis el llamado que hace vuestra conciencia que está conectada con vuestro Guía. Íntimamente están conectados para poder entregaros, para poder guiaros, empero nunca le escucháis, sois los eternos sordos, sois los eternos desentendidos y nunca queréis escuchar el llamado que siempre se os hace a vosotros, nunca, cuando os Digo “Vengo a despertar vuestra conciencia adormecida” no penséis que es la que está íntimamente ligada con el Guía, no. Sino que la que está ligada con el Guía propiamente, vienen siendo los sentidos, empero no penséis que son los sentidos puramente humanos, no, sino que son los sentidos Espirituales (Conciencia del Guía). Empero vuestra conciencia se encuentra adormecida, por eso os Digo; “Vengo a despertar vuestras conciencias, Vengo a que en verdad seáis lo que decís, a que en verdad aprendáis a escuchar los mensajes que vienen desde las Alturas. Vengo a que en verdad escuchéis, a que vuestro oído perciba las ondas magnéticas vibratorias que vienen transmitiendo los mensajes del Astral, los Mensajes Mesiánicos que os vengo entregando y que debéis escucharlos vosotros mismos, sin necesidad ya de antena humana.

 

Empero por vuestra propia voluntad hace tiempo que no avanzáis, hace tiempo que os encontráis en el mismo lugar, sin ir más arriba y sin ir mas abajo, porque todo aquello que progresa, todo aquello que evoluciona, puede estar fijo en ese mismo estado de evolución, empero no puede retroceder, ya no puede ir mas abajo de lo que está, sino que la Ley de Progreso, de la Evolución, espera, le da tiempo a aquel Ser o Seres a que permanezcan en ese mismo estado de Evolución, empero si la Ley ordena que prosiga su Evolución y el Libre Albedrío de aquel no lo desea, puede proseguir un tiempo más en ese mismo estado, puede hacerlo, empero, cuando la Ley vuelve a hacer el llamado para su evolución, entonces sí, quiera o no quiera tiene que evolucionar porque se necesita que evolucione, porque es necesario pasarlo a otros trabajos Espirituales, darle tareas, que le hagan evolucionar, tareas que le sirvan para su propia Evolución, tareas que le sirvan para el bien mismo de él, para que logre obtener el adelanto necesario, que le sirve a él, para su propio adelanto.

Empero que pocos son los Seres que en verdad desean avanzar en el camino, transitar por otros caminos, transitar por otras veredas, transitar por los caminos de Luz. Recibe un Hosanna a ti Ser bendito, Hosanna a ti Ser que vienes a las Mansiones de Altura, que vienes a las Mansiones de Luz a recibir de la misma Luz, a recibir de la misma Luz que existe en las Alturas Siderales, en donde los Luminares se preparan para dar enseñanza a los pequeños Luminares en ciernes, a los pequeños Luminares que van por los caminos de Luz, por los caminos de Amor.

Los Luminares que se dedican amorosamente a enseñar a los Luminares en ciernes, que esos mismos Luminares en ciernes con el transcurso del tiempo, cuando ya pasen la etapa de ser Luminares en ciernes, que ya sean en verdad verdaderos Luminares, entonces enseñaran a otros Luminares en ciernes, empero no dejando de recibir también ellos enseñanzas de Amor. Porque no creáis que nada más hasta ahí llega la etapa de la Evolución, no, sino que ya entonces la Ley no necesita forzaros para que Evolucionéis, sino que vosotros mismos, por algo que os impulsa a proseguir evolucionando proseguís obteniendo conocimientos y más conocimientos, empero espiritualmente y así sucesivamente.

Hay Seres en el espacio que tienen años estando en ese mismo estado de Evolución, sin haber ido más allá y ni haber regresado más acá. Empero la Ley de Evolución ya sabe quiénes son los que tiene que conmover para que puedan despertar de su letargo y moverse para que evolucionen. La Ley sabe perfectamente cuales son los Seres que necesitan que evolucionen para su propio adelanto de ellos, porque sois persistentes y proseguís con la misma idea de no avanzar, de proseguir en el mismo lugar. ¿Por qué no os ponéis a tomar en consideración que eso es un mal para vosotros mismos?, que cuantos de vuestros amigos, de vuestros Seres queridos, están ya mucho más avanzados que vosotros mismos y sin embargo seguís en el mismo lugar sin avanzar. ¿No os da vergüenza que el Planeta Tierra no vaya en donde le corresponde ir? ¿No os da vergüenza que el Planeta Tierra este mas abajo que otros planetas? ¿No os da vergüenza ello, Humanidad Amada? No Mis pequeños, este Planeta Tierra ya debería de estar junto con sus moradores brillando. Este Planeta ya debería brillar, porque las Auras de sus moradores deben ser ya brillantes, las Auras de sus moradores deberían ser luminosas. Las Auras de los habitantes de este planeta tierra deberían ya iluminarlo, para que se viera la tierra como una estrella más que pende del manto celeste, en la bóveda celeste y que brilla con Luz propia, porque es la Luz propia de sus habitantes.

Amados Míos que desde vuestro principio espiritual tenéis a vuestros Guías que os ayudan, a vuestros Guías que os acarician, a vuestros Guías que piden por vosotros mismos, a vuestros Guías que cuando tenéis vuestra primera encarnación como Espíritu elemental que sois en principio, ellos os ayudan a que pronto avancéis, ellos os ayudan a que pronto paséis por la escala de la evolución, por la escala que la Ley de Evolución ha trazado para todo aquel Espíritu elemental. Si amados Míos, que poco valor le dais a la Misión que tienen vuestros Guías, vuestros Guías que amorosamente van siguiendo paso a paso vuestros pequeños pasos en Espíritu elemental que sois. Esos amorosos Seres de Luz que por siempre andan tras de vosotros, para por siempre iros llevando por un buen camino, para por siempre iros guiando amorosamente, para que las caídas que tengáis, ellos amorosamente son el cojín para que aquella caída no sea tan dolorosa para ti, para que aquella caída no sea tan profunda la herida que te deje, sino que por el contrario, pronto se te olvide aquella caída y vuelvas a levantarte fortalecido. Si, fortalecido porque tu Guía te sirve de fortaleza, porque tu Guía te sirve para que no decaigas, sino que por el contrario por siempre te encuentres fortalecido, por siempre te sientas fuerte para poder proseguir mas adelante con tu carga pesada, con tu carga de Causas y Efectos, que tienes que sentir con el látigo del rigor de la Ley que se deja sentir, para que tu Espíritu endeble, tu materia, tu Alma resista los embates de la vida, primeramente en la materia, después en Alma, si algo tiene que pagar en Alma. Si no tan solo serán los embates de la vida material. Empero son embates, porque son huellas profundas, que para poder borrar esas huellas profundas que te viene dejando el rigor del látigo, esas huellas que te viene dejando la Ley, sean lo más pronto borradas esas experiencias tan amargas, en que estas apurando el cáliz hasta las heces. Esas experiencias que nunca dejaran de ser en ti para irte moldeando. Para ello está el Guía, para quitarte aquellas heridas lacerantes que te dejan esas experiencias tan amargas. Experiencias tan amargas que nada más un pequeño recuerdo debes guardar de ellas, precisamente para que el rencor, para que todo aquello desaparezca y luego más tarde cuando te encuentres en Espíritu, poder decir a otros Espíritus que tú ya pasaste por aquello. Sí, que experiencia amarga te ha dejado aquello; que tú ya pasaste experiencia amarga, porque por mucho tiempo te quedo el sabor de experiencia tan amarga y que de eso compartió contigo tu Guía y que de eso tu Guía fue el que te quito el sabor, porque fue hasta cuando tú le hiciste caso a tu Guía de seguir los caminos que deberías seguir. Hasta entonces ese sabor de acíbar tan amargo, desapareció de tu paladar y que de ello tan solo conservas un pequeño recuerdo para que otros que están por pasar por las mismas circunstancias que tu, no lo pasen. Sino que escuchen el llamado de su Guía y prosigan sin sentir el acíbar amargo en su paladar.

 

Empero nunca el humano hace caso a las recomendaciones que un Espíritu de Luz puede hacerle, nunca quiere tomar en consideración las experiencias de otros que están previniéndole del peligro, por el contrario; aun después de que aquel Ser le ha advertido del sabor que tomara aquella experiencia, aun después de que el Guía de aquél trata por todos los medios de evitar la caída de éste, no hace caso y da el paso. Y tenéis que el Guía entonces tiene que ser el cojín, para que aquel pequeño niño que tiene a su cargo, no se vaya a lastimar, empero la Ley es la Ley y le deja que se lastime un tanto para que vaya sabiendo cual es el sabor de experiencias advertidas, para que se vaya dando cuenta que no nada mas se le advirtió, que no nada mas se le puso su propio Guía de cojín para que la caída no fuera tan dura y lastimera. Y sin embargo se lastimó y sin embargo la herida que le causo experiencia tal, caída tal ha sido de un sabor amargo. Pero quiso probar del acíbar amargo para poder el decir; “Yo tuve esta experiencia”.

Amados Míos, pequeños Luminares en ciernes, pequeños Cristos en ciernes, benditos seáis, Mi Amor por siempre os cubra.

Los Guías de vosotros se comunican con los Guías de ellos, para que estos los ayuden a ellos, para que vosotros podáis escuchar el llamado que ellos os vienen haciendo, empero no escucháis ese llamado y Vuelvo a repetirlo; sois sordos.

Vuestros Guías a través de las experiencias milenarias van perfeccionándose, hasta llegar a ser lo que son, siendo ellos Seres evolucionadísimos. Siendo en primer término, la primera etapa que corresponde a los Guías, de ser primeramente Guías de Seres elementales para que vayan afinándose esos Guías y al transcurso de sus experiencias, de sus estudios como Guías elementales que son (en principio) van llenándose también de la paciencia que todo Guía elevado, todo Guía de Luz, tiene con su “guiado”. La paciencia que todo Guía debe tener, porque de la paciencia, de la tolerancia, también surge el Amor.

El Amor, el verdadero Amor, ese Amor Divino que va surgiendo de los Guías a sus guiados, ese amor verdadero, sin mácula, ese verdadero Amor que no tiene interés porque no hay nada que podáis darle a vuestro Guía, que vuestro Guía no lo tenga. no tratéis de ofrecerle en pago de su ardua tarea, cosas materiales, no tratéis de ofrecerle algo que sea vano para que lo tome en pago él, de la tarea que lleva a cuestas. No hay mejor pago a vuestros Guías que el seguir los pasos que ellos os vienen indicando.

Que mejor pago para los Guías de vosotros que el de ir por un camino recto, que el de ir prosiguiendo los pasos, que el de ir avanzando paulatinamente, pero seguros de que jamás vais a retroceder. Esta puede ser la compensación al trabajo continuado, al trabajo arduo de guiar, al trabajo que amorosamente vuestro Guía lo toma, al trabajo que vuestro Guía le sonríe y dice amorosamente: “Este es el Ser que Yo Guío porque le Amo. Este es el Ser que Yo he arrullado, que Yo he guiado sus pasos por los caminos y que el ha tratado de transitar, pero que son caminos equivocados, pero para ello estoy Yo, que voy guiando los traspiés que va dando, para que salga de ese camino equivocado. Yo te voy guiando, Yo te llevo de la mano, Yo velo tu sueño cuando duermes (estando encarnado), Yo te sigo guiando y cuidando aun desencarnado. Constantemente te cuido, constantemente te hablo, constantemente trato de que mejores, consiguiéndolo algunas veces y en otras no. Constantemente cuando has estado a punto de caer, Yo te levanto, porque Soy el bálsamo que te cura, Soy el bálsamo que te alienta y cuando más solo se cree Mi pequeño, mas cerca Estoy de él.

Cuando pasa a ser Espíritu, Yo estoy con él. Estando en Espíritu cuando le hablo, cuando me escucha, trata de verme pero es imposible y Yo le digo, aun no es el tiempo de que me veas, todavía es el tiempo de que me escuches. Con  cuanta ansia me busca mi pequeño y Yo le calmo y Yo le digo; “Cuando los tiempos lleguen, me veras, cuando tu evoluciones más, me amaras como Yo te Amo”. Pero aún no es el tiempo, aun no estas en la etapa de que me veas. Estas en la etapa de escucharme y aun te falta la etapa de amarme. Evoluciona, adelanta, muévete, ama a Mi Padre, que también es tu Padre, ama al Cristo que es de ambos y cuando sientas amarles intensamente, por la Ley de Equidad me amaras también.

Al amarme me veras y este será el premio a tu esfuerzo por tratar de evolucionar y a la vez por haberlo logrado. Estos diálogos tan hermosos, estos diálogos tan elevados, tan profundos que sostienen variadamente los Guías con los Espíritus que guían; que belleza, que armonía, que comprensión del Guía para con su espíritu que guía y aun con todo ese Amor que tienen ellos para vosotros, no les comprendéis, no les amáis lo suficiente y al no amarles no les tomáis en consideración sus consejos, sus palabras amorosas que os dan consuelo cuando os sentís tristes y deprimidos. Y siempre tratáis de darle la controversia a vuestro Guía, siguiendo por caminos equivocados que no os dejan adelantar. Que seguís en el mismo estado de evolución y que vuestro Guía trata de que tomes el camino recto, el camino que vosotros traéis ya trazado. Que pequeños sois y a la vez no os conformáis con ser pequeños, sino que también no tan solo derogáis las Leyes Divinas de Nuestro Padre, sino que desobedecéis también a vuestro Guía. Mas la paciencia, el amor y la tolerancia de vuestro Guía son inmensos, son infinitos y por lo tanto, no creáis que por ser desobedientes a la palabra de él os va a abandonar y os dejara en el mar de confusiones que os encontréis. El Guía es el Guía y jamás dejara de serlo.

Tomad en consideración todas estas cosas, los esfuerzos de vuestros guías para que la barquilla que lleven a su cargo no zozobre en el mar de confusión. La barca que va capitaneando el Guía no puede zozobrar y sin embargo en muchas de las ocasiones esa barquilla trata de zozobrar cuando el peso del lastre que lleva en cubierta, ese lastre es el que hace que muchas de las veces la barca que el Guía lleva zozobre. Empero el buen capitán demuestra ser buen capitán con hechos, no con palabras, enderezando la barquilla y sin que la tripulación haya perecido. Es decir: la barquilla viene siendo la materia (Cuerpo), la tripulación viene siendo Alma y Espíritu y el capitán el Guía.

 

Siempre que pienses hacer una obra o acción, escucha, oye y siente el llamado que hace tu Guía a tu conciencia y esta a su vez a ti. Cuando tu sientas en tu Interno algo que se mueve, que tu sientas en tu corazón que aquello que todavía no haces aun, presientes que es malo, que harás mal, que vas a herir a tu prójimo, sigue ese impulso porque es tu Guía quien te dice que aquello que harás será un lastre para ti más tarde, pesara sobre tus hombros, proseguirás en la cadena del constante ir y venir, de pagar por cobrar y será mucho el tiempo que pierdas, para poder salir de dicha cadena y cuando tu quieras arrepentirte, cuando hayas consumado tu acción, entonces tarde será ya para arrepentirte, empero sin embargo te podrás arrepentir y saldrás.

Escucha si escuchar sabes, siente si sentir puedes, entiende si entendimiento tienes.

Escuchadme Mis bien amados, porque la tarea de vuestros Guías es ardua para estos tiempos, en que la Luz se hará en este planeta, para estos en que será la transformación del planeta tierra, en que será la nueva edad de la Luz. La nueva Edad, la Quinta Raza Raíz. Porque para que el planeta reciba Luminares necesita de un sacudimiento, para que sacuda su corteza del polvo que le rodea, que le viene infectando, necesita el planeta tierra de un sacudimiento. Para que ese sacudimiento le sirva, para que todo aquello que es lastre lo deseche, para la nueva venida de los Seres de Luz, de los Luminares, de esos Seres Grandes Iniciados, de esos hombres justos, mas no santos, de esos hombres que han existido en vuestros tiempos, que decís pasados, formaran la Nueva Edad, porque Misión traerán para que desarrollen en el planeta. Una Misión traen esos nuevos que vendrán, sí, a enseñar a las multitudes de las cosas del Espíritu. Empero no creáis que es una nueva religión, no creías que es una nueva secta, no creáis que es una nueva filosofía, no. No penséis en ello, tan solo lo único que debéis pensar que es una misma Doctrina, que es la misma que hace años vine a dejarte: “AMAOS LOS UNOS A LOS OTROS”. Esto será nuevamente lo que te vengan a decir los Iluminados, esto será lo que ellos vengan a enseñarte y otras cosas más. Empero tened presente esto, que ellos no vienen a dividiros mas de lo que estáis divididos. La Misión de ellos consiste en que deben formar de los miles, de los millones de familias que hay: Una Sola. Sí, buscar la unificación de la Familias para que estas a la vez que son millones de familias, son también una sola Familia perteneciente a la Gran Familia Universal.

Y he aquí el eslabón Divino, Mi tarea redentora, que viene culminando en la manifestación de atraer a los unos y a los otros al redil de Amor.

Que no te interese el tiempo, que no te interese sea el frío o el calor, sea el Sol o haya nublados. El nublado puede prevalecer en tu atmósfera, pero el Sol que irradia del Amor supremo, debe hacer manifestación potente en tu Alma, en tu vida y así Mi Palabra se desgrana, es como tañer de campanitas de oro al llamado Espiritual para tu Alma y para tu conciencia.

 

No importa que los hombres en la actualidad practiquen otras religiones, otros ritos, no interesa al Cristo; la parte fundamental y esencial es la vida del hombre, las prácticas de la vida del hombre esencialmente. Llevando a cabo los dictados del Divino Padre en sus Supremas Leyes.

No interesa a Dios las religiones, no interesa al Cristo las prácticas de otros. Pero si Digo a vosotros que sois los privilegiados en ser, en recibir de las Enseñanzas del Cristo por medio de Irradiación, tanto en esta sede como en sedes lejanas, sois los privilegiados en ser de las primeras avanzadas, de los verdaderos doctrinarios que seréis mañana.

Yo os Digo, en Mi Doctrina no hay equivocaciones. Se equivoca el hombre porque tergiversa Mis conceptos, la palabra (muchas veces) por los distintos aparatos.

Mas Mi Doctrina de Amor es Limpia, Purísima, Recta y Sabia como Aquel que la dirige y el que la dirige Soy Yo, el que te Habla.

En Mis distintas fases de Mis distintas Cátedras, por distintos aparatos, He ido tocando, como todos los maestros del mundo hacen contigo; puntos tomados hoy, puntos mañana, para ligar la parte Espiritual con la parte material, puesto que eres una amalgama de parte esencial Espiritual y de parte material … parte de Cielo eres y parte de Tierra, parte de Luz y parte de sombra, parte de Verdad y parte de falsedad, de equivocación. Y por eso ligando lo Divino con lo Humano, he aquí El que sabe decir las frases Verdaderas, El que emite sus Pensamientos que son transformados, interpretados por Mis Aparatos. Vengo a darte lección, cada vez esencial.

Y bien, estáis en el séptimo mes de vuestro año “cincuenta y siete”, parece que la premura del tiempo va siendo cada vez mayor y decís vosotros: “pasan los días tan rápido que me parece que el primer día del año fue ayer …”.

No te indica Mi pueblo amado, esencialmente digno de tomar en consideración, que los días transcurren con rapidez vertiginosa. Tal parece que el tiempo tiene premura y quiere hacerte comprender que estas perdiendo un tiempo precioso.

Mis bien amados, vosotros que ya habéis presentado examen en vuestras aulas en todo lo que habéis aprendido en vuestro año pasado, de todo aquello que ya aprendisteis, ya habéis pasado examen. No te parece que si YO tácitamente Soy el Divino Maestro de todos los Maestros, si en todas Mis Cátedras Voy Enseñándote y tocándote distintas formas y puntos para la rectificación de tu vida, quiere decir entonces que debes prepararte ¡Oh Mi pueblo amado! Para que entregues, para que presentes examen. No solamente el del año de 57, de muchos años atrás, de mucho tiempo atrás en que has venido Escuchándome.

 

Yo te he Hablado de la parte esencial del Espíritu, que es lo que corresponde al Yo Superior del hombre y sin embargo, si Yo Pidiera una explicación en este momento a alguno de vosotros, no sabríais darme exactamente el sentido de esas Enseñanzas.

Yo te he Enseñado cuáles son tus deberes, tus obligaciones; obligaciones materiales y deberes Espirituales, para con Mi Padre Dios, para con la religión, para con la Doctrina en la cual estas y la cual pretendes practicar. Te He Enseñado para que vayas delineando, para que apartes tus pensamientos y prácticas de ayer en los moldes viejos y anticuados. Cuando tenías la Fe en las estatuas, en las imágenes hechas de madera o de granito por las manos de los hombres, cuando te arrodillabas. Y aun algunos de vosotros se postran en la tierra para encender una antorcha, una Luz, a una imagen fría que no tiene Alma.

Y así te Voy Enseñando y aun permaneces en tus prácticas, porque viene de padre a hijos y van pasando los siglos y la raigambre queda profundamente en el subconsciente de cada humano sobre la tierra.

Te He Enseñado que la Ley de Herencia no existe y sin embargo muchos de vosotros proseguís con esa misma idea y sin embargo muchos de vosotros aseguráis que la Ley de Herencia sí existe. Cuan equivocados estáis, porque a pesar que Mi Enseñanza es clara y preclara, persistís en que la Ley de Herencia es; a pesar de Mi Enseñanza clara y precisa.

Es decir si en tus ancestros o en tus seres amados presentes, desdichadamente tienes un demente, tú crees que los seres por venir también serán  y no consideras Mi pueblo cuando una epidemia llega a esta tierra que es el “Karma Colectivo” que le corresponde, en que se diezma a la humanidad y no solamente por centenares sino por miles desencarnan con los mismos sintamos y las mismas enfermedades ¿Es aquello herencia acaso? No Mi pueblo. Esto es algo de lo que tu aun persistes.

Quiero que Me comprendas Mi pueblo amado y que no solamente te concretes a oír, sino que analices de Mi palabra y de Mi enseñanza.

Fíjate bien cómo te He Enseñado la Ley del Deber y sin embargo no lo has hecho, el deber que tienes, el deber que debes cumplir. Así como Yo cumplo con Mi deber, así debes tu cumplir con tu deber. Así debes ser tu si quieres llegar a ser un Ser Iluminado. Tu deber debes recibirlo resignadamente, sin rodeos, sin esperar mas tiempo del que ya tienes perdido.

El deber del Cristo es: Estar en contacto con los pecadores, créalo el hombre o no lo crea, el deber del Cristo es Salvar a los pecadores. Y no Me detengo, nada detiene Mi paso, ni Mi palabra, ni Mi Pensamiento, porque Mi deber Sublime Espiritual Yo lo Amo. Porque de Mi Padre Dios He recibido su mandato y aquí Me tenéis dando redención a los pecadores, por los labios de pecadores. Pero la pequeñez del pensamiento de los Míos, se traduce en expresiones tan pequeñas, como pequeño es el entendimiento.

 

Porque muchos de vosotros, de los que Yo considero que son mas del Cristo que de Tomas, de los que más tratan de seguir Mis huellas por el camino, a muchos de vosotros Os He encontrado en vuestras profundas meditaciones cuando tenéis nada que hacer, cuando vuestras obligaciones están terminadas, empero no vuestros deberes, porque vuestros deberes Espirituales no os habéis tomado la molestia siquiera de empezarlos muchos de vosotros.

Muchos de vosotros cuando os acercáis con vuestras tribulaciones decís: “Si en verdad es el Hijo de Dios, si en verdad es el Maestro, yo sabré manifestarle mis cuitas, mis penalidades, mis problemas, mis angustias. Y si El es el verdadero Maestro, el sabrá remediar mis necesidades, de inmediato las remediara”. Crasa equivocación, oh Mi pueblo amado.

Aunque la Ley del Deber no debe terminar nunca, en verdad y de cierto Os Digo: La Ley del Deber permanece constantemente en cada uno de los humanos, la Ley Divina impone el Deber al Cristo de estar constantemente en manifestación con los humanos. No solamente los hombres del mundo tenéis que cumplir, Yo Tengo los Míos y Te Doy la lección de cómo sé cumplir con Mi deber Sublime Espiritual de Amor, de amor y de sacrificio y aun así vienes y dices, vienes y dudas de Mi. ¿Es que aún no Me Amas todavía? ¿Es que aun tus deberes Espirituales no piensas principiarlos para estos tiempos en que el tiempo apremia tanto, en que el tiempo transcurre y ya no sabes ni en donde te encuentras? Implica sacrificio para el Cristo dejar el lugar que justamente le corresponde, para estar en contacto con todos los pecadores, más o menos pecadores.

Yo Estoy con la humanidad aunque esta esté en los antros repulsivos del vicio … y aun del crimen ¿Por qué? Porque le Amo, por eso es que Me sacrifico dejando el lugar que Me corresponde, porque Te Amo humanidad y porque un día Dije a Mi Padre Dios: “He aquí a estas ovejitas descarriadas que Yo haré que vuelvan nuevamente al redil y hasta que no quede una sola de Mis ovejitas dentro del redil, es decir, que cuando todas estén reunidas, las Llevare junto Conmigo hasta el lugar que Me Corresponde y aun ahí seguiré cuidando de ellas”.

Recuérdate esto humanidad; En donde           quiera que estés ahí Estaré Yo … a donde quiera que vayas, ahí Iré Yo.

Pero he aquí las pequeñas mentes piensan y discurren así: “Acudir a la Doctrina del Maestro asiduamente es fanatismo”, “Leer con frecuencia las Doctrinas del Maestro es fanatismo”. Que cómodo es para vosotros tergiversar el verdadero sentido de Mi Doctrina diciendo que es fanatismo, lo que no es más que el cumplimiento del deber Espiritual.

 

¿Es fanatismo acaso el de las madres que arrullan al niño en sus brazos? La madre que vela por el pequeñito niño y sigue velando aunque crezca y le sigue amando aunque sea un hombre o una mujer y sigue con sus mismos problemas y las mismas suplicas por aquel hijo o por aquella hija de su corazón y de sus entrañas ¿Es acaso eso fanatismo Mi pueblo?

¿Es fanatismo el de los maestros de vuestras Universidades, dejar los años todos de su vida enseñando hoy, mañana y siempre, hasta que parten a Oriente? Han dejado sus esfuerzos, sus energías, enseñando, enseñando siempre ¿Podrías decirme que eso es fanatismo? ¿verdad que no Mi pueblo amado? Empero Yo si te puedo decir que tiene fanatismo, Yo si Te Puedo decir que lo que tú haces es fanatismo ¿Y sabe por qué? Por esto: porque Yo te Estoy repitiendo y repitiendo de una manera o de otra por distintos labios, que aquello que tu cometes no está bien. Te He Dicho que ante las imágenes que tu doblas la rodilla ni tienen alma, que no hay necesidad que tu dobles la rodilla ante esas imágenes. Lo comprendes porque te lo digo, lo sabes perfectamente bien y sin embargo lo haces ¿Verdad que si es fanatismo? ¿Verdad que esto si es fanatismo? Porque Te Estoy Diciendo que no tiene Alma esa imagen que fue tallada por mano de hombre, que fue esculpida por mano de hombre y sin embargo lo haces y sin embargo lo sigues haciendo. Te He Dicho que todas esas cosas son anticuadas y que para tu manera de pensar, ya no te quedan.

Te He Dicho también que busques a Mi Padre Dios, que es tu Padre, en tu propio hermano y semejante, Te lo He Dicho tantas veces y Te lo Sigo repitiendo “Ama a tu prójimo como a ti mismo y estarás amando a Dios” y sin embargo, no lo haces, por el contrario lo odias, lo tomas en venganza y tantas cosas más, eso sí es fanatismo, el que acabando de salir de escuchar una de Mis Cátedras, prosigas más adelante para penetrar a una Sinagoga, para postrarte de rodillas ante imágenes que no tienen vida y sin embargo a pesar de todo lo sabes y los harás. Hasta que vengan otros y te hagan ver que todo eso que tu haces, eso si que es fanatismo, no Mi Doctrina.

Porque fanatismo no es enseñar al que no sabe y eso Vengo Haciendo Yo contigo; Enseñándote. Y si eso lo tomas como fanatismo, decide entonces que es lo que para vosotros deja de ser fanatismo ¿Que te esté repitiendo Yo también lo que te dicen otros, para que todo eso te siga siendo una venda en tus ojos? No Mis bien amados, Yo Te Vengo quitando las cadenas que aprisionan a tu Espíritu y tú fanático en tus ideas, fanático en tus ritos, prosigues de frente sin siquiera escucharme con la atención debida, ¡Que pequeño eres y que fanático!

Bienaventurados son aquellos que creen en Mí, por tres veces bienaventurados sean y benditos que Me aman por lo que Soy. No por lo que el Cristo les entregara. Que son Mis doctrinarios amados, aunque llueva, aunque haga frío, que son Mis trabajadores amados. Aunque tengan problemas, dolores y amarguras, porque creen en Mi y el que cree en Mí, jamás morirá. Porque el que cree en Mí y Me Ama y bien Me sirve … el buen trabajador un día tendrá su recompensa.

 

¿Es acaso que creéis que es demasiado el servicio que hacéis de Mi Doctrina? ¿Creéis que es suficiente ante Mi mirada Espiritual, lo pequeñito que hacéis en Mi Obra?. Recordad bien esto Mi pueblo amado; Toda vuestra vida en el servicio Espiritual, es poca cosa cuando entreguéis las cuentas en el momento supremo.

Qué bello debe ser Mi pueblo, cuando entres en agonía, en los cuadros sucesivos que se te irán presentando antes de partir al Oriente, en esos cuadros ver que has cumplido con tu deber.

Cumplir con “el deber” es servir en Mi Obra, cumplir con el Deber Espiritual de Amar a Dios sobre todas las cosas. Y El, no dice que es fanatismo dar hoy y dar mañana. El no dice: “dar a los hijos que Yo He Creado” eso no es fanatismo; es el sublime deber del Padre para con sus criaturas todas.

No es fanatismo que el Cristo se derrame hoy y mañana y siempre, delineando como debéis seguir adelante, por el verdadero Sendero .. no es fanatismo. Mas vuestros labios cómodamente lo dicen y … Yo el Cristo que todo lo oye, lo He Escuchado tristemente.

¿A dónde la efusión del principio? ¿A dónde el entusiasmo? ¿Por qué habíais creído que el cumulo de penalidades y sobresaltos y problemas que no podéis vosotros desentrañar, el Cristo con una sola palabra puede cambiar vuestras vidas, que son vuestro propio destino que habéis forjado vosotros con el material de vuestra mente?

Material tenéis en la mente para forjar con vuestras propias manos y ser los artífices, los arquitectos de vuestro propio destino.

Y así, cuando habéis sentido que no llegaba aquello que estabais esperando, no como una entrega por el Amor Sublime y la compasión del Divino Padre, sino exigiendo tal, cual al acercarse a Mi Doctrina habéis adquirido, según vosotros, los derechos para recibir aquello … de que no sois todavía merecedores. Reflexionad en Mis Cátedras, en Mi Enseñanza y no volváis a pronunciar palabra tan equivocada.

No es fanatismo Amar a Dios sobre todas las cosas, no es fanatismo servir en Mi Obra. Lo insignificante que hacéis, si los hacéis con buena voluntad, con creces os será recompensado; pero sin que exijas jamás.

Bendición y caricia para los obedientes. Bendición y caricia y ternura, para los que saben dar cumplimiento a Mi Palabra, Mi Palabra que debe ser Ley para los hombres. Pero una Ley espontanea, una Ley sin restricciones, una Suprema Ley espontanea surgida por el sentimiento del deber, ese sublime deber que empezáis ya en pequeño a practicar.

La vida es una sucesión de actos inaplazables; se suceden unos con otros, porque así lo requiere la propia vida.

 

Así como necesitáis de oxígeno para respirar, así como el cuerpo necesita del alimento para subsistir, así como necesitáis de vuestros ojos para contemplar la Luz del día, así se necesita también un baño Espiritual. Así necesita el Alma de la cálida brisa de Mi Enseñanza, para poder elevarse y aletear como blancas mariposas de Luz.

El Espíritu dirige, la Mente fabrica, el cuerpo practica … trabaja, crea, obra. Entonces debéis vosotros dejar que el Espíritu os dirija, que la Mente sea creadora de todas las cosas grandes y bellas, para el engrandecimiento y la purificación de vuestra propia Alma, porque en esa sublime ecuación maravillosa de la creación ( sublime sí, porque las Leyes Divinas ni fallan, ni se equivocan jamas) dar cima a las Leyes Supremas y Espirituales del Supremo Creador, es encauzarse en el verdadero Sendero, en el verdadero camino. Es dar limpieza y pulcritud al Alma, es limpiar, es hacer del Alma el vehículo, para que el cuerpo pueda actuar de acuerdo con el Alma y con el Espíritu que dirige ¿Me estáis comprendiendo Mis amados varones?

Así como el cuerpo necesita aseo, así como el cuerpo necesita descanso y sueño reparador, también el Alma, el Alma que esta identificada con el Espíritu y la materia, puesto que vosotros sois Espíritu, Alma y cuerpo. Así el Espíritu necesita del aseo del Alma, para que esta a su vez, tenga el merecido descanso el cuerpo, el verdadero descanso que debe tener el cuerpo, dejándolo por completo descansar, transformándose éste en materias más pequeñas y el Alma descansa de la materia así como también el Espíritu, porque se ha aseado el Alma y a la vez el Espíritu se ha purificado.

Ahora Mi pueblo, Quiero también que desaparezca de tus labios, de tus labios que bien pueden brillar con la palabra de amor, que bien pueden brillar hablando de las cosas del Espíritu, de las verdades inmutables, empero tus labios tal parece que te empeñas en que por siempre estén opacos. La siguiente frase que Quiero que desaparezca de tus labios es esta “Lo hice en defensa legitima” ¿Que entienden Mis doctrinarios por “legítima defensa”, según palabra puramente humana?

“Defensa legitima” ¿Qué bellas palabras, verdad? Dice el hombre para escudarse de actos que no debe ningún Cristiano practicar, suceda lo que suceda, pase lo que pase.

Eran dos varones amados, que aparentemente se amaban y se comprendían. Pero hubo un tercero que influyo malamente a uno de ellos en contra del otro … él, fácilmente influenciable, acepto como verdad lo que era mistificación, lo que era mentira, lo que era traición, calumnia. Sin detenerse a pensar, inopinadamente, inculpo al que llamaba su amigo, lo insulto cruelmente, duramente. Cuan dura fue la palabra, cuanto dolor causo en el corazón de aquel que ningún daño había hecho. El estupor dejo al ofendido mudo de asombro, pero no había indignación en su Alma. Una oleada de amargura subía de su corazón a sus labios, que se transformó en llanto de sus ojos, pero sus labios no se abrieron para justificarse, porque el inocente no necesita justificarse; como no se justificó Jesús cuando le inculpaban las multitudes. Cuando hubo desencadenado toda su ira, el ofensor lo reto a golpes y aun a sacar un arma para ver quién de los dos tenía más fuerza. El ofendido calló, calló siempre y el ofensor lo reto … y el ofensor enardecido levanto la mano para dejarla caer en el rostro del ofendido. Mas he aquí, la mano no cayo, no cayo golpeando, cayo a lo largo del cuerpo y volviendo la espalda … se alejó.

Ah Mi pueblo, si tu tuvieras la mente limpia y el corazón puro, en todos los actos de tu vida no necesitarías jamás decir: “fue en defensa legitima”. Que la inocencia de los hombres trae como consecuencia la inutilidad de la agresión.

¿Por qué aquel hombre no golpeo al inculpado? Porque las fuerzas ocultas lo desarmaron, bajaron su mano agresiva y cerraron sus labios. Porque en verdad estaba cometiendo una injusticia.

Ahora sabe Mi pueblo para que lo practiques en tu vida: El que tiene limpia la mente y puro el corazón, no necesita jamás decir “lo hice el legítima defensa”. No hay defensa legitima, cuando hay en la mente sombras, cuando hay inquina en el corazón. Cuando eso sucede la Ley permite la agresión; pero cuando te sientas inocente de culpa sin que tus labios se abran para decir: “Soy inocente de lo que me inculpan”, las fuerzas ocultas, Mi Padre Dios que todo lo ve, el Cristo de Dios y todos los seres que te protegen y que te aman, no permitirán que se te castigue nada más porque sí,  no. Y no tendrás que esgrimir la palabra; lo hice en defensa legitima.

Esta es la lección, apréndela, la última lección de este libro. He hablado con claridad meridiana para que recapacites, para que tus labios no pronuncien palabras inútiles, por el contrario palabras útiles, como estas: “Con el Amor en tu corazón, es imposible que te equivoques”.

Primavera de Luz, primavera de felicidad y de dicha para ti imperecedera, por todos los siglos.

Se cierra el arcón de Oro sobre el cofre luminoso de “Luz en el Sendero”, se cierra la tapa tras de la última lección que tienes que aprender de este Primer Tomo. Se cierra la tapa de oro para que este libro vaya iluminando con la Luz que le corresponde a este Primer Tomo. Se levanta la campana Cósmica que a de dar paso a la potencia que ha de preparar más y más a la materia, porque aún le falta preparación.

Ciérrese la tapa de Oro y quede en los archivos Akashicos los momentos, los segundos, los minutos en que la materia estuvo en disponibilidad de dar servicio para terminar de este Primer Tomo de “Luz en el Sendero” y que esto le sirva a ella para cuando este en los momentos de agonía, pueda contemplar que cumplió con parte de su Misión en la Tierra, porque el complemento de ella, lo hará en el Espacio.

 

Bendita seas, Yo te bendigo desde el cráneo hasta la planta de tus pies … así como también Bendigo a todas Mis Antenas humanas que dan servicio de Alta Cátedra y aquellas que están por dar servicio y a aquellas que no lo dan, empero que cumplen con su Misión de alguna manera. Benditos sean todos los Aparatos Receptores de Cátedra y que no sean de Cátedra. Yo las bendigo por su grandiosa Obra, así como a todos los moradores de este bendito Planeta.

Con todos es Mi Amor, adiós Mi pueblo amado y recuerda; “Amar a Dios sobre todas las cosas y a tu prójimo como a ti mismo”. Así como; “Con el Amor en tu corazón es imposible que te equivoques”. Y amaos los unos a los otros, no es fanatismo Mi pueblo. Estudia Mi lección que Te He Entregado en este último Capitulo del Primer Tomo de “Luz en el Sendero”.

Se levanta la Campana Cósmica … y se cierra la Tapa de Oro que ha de servir de portada a este precioso y Luminoso Libro.

Quedad en paz … id con Dios hijos de Este Mismo, adiós hermanos Míos, pequeñitos Míos.

 

 

 

Tu Maestro

“Jesús”